FERRÁNDIZ, EL MATAMUJERES

  • Cruz Morcillo, la autora, nos trae la crónica periodística y de investigación de un caso que conmocionó a la sociedad española. En esta obra se pone de manifiesto tanto la maldad humana como la pericia de la Ley para atraparla.
    El argumento se basa en la investigación de la Guardia Civil para encontrar y encarcelar a un violador y asesino de mujeres.
    Durante la lectura se pueden distinguir dos temas principales en torno a los cuales gira la obra. Por un lado, se centra en el trabajo de la Guardia Civil y de los integrantes del poder judicial. Y por otro, narra cómo una persona normal y corriente, en apariencia, esconde un compartiendo psicópata.
    Centrándonos primero en la actitud y personalidad del criminal, podemos observar una persona, que, aunque un tanto introvertida y tímida de cara a su faceta social, esconde un monstruo en su interior. Viendo a este individuo, también vemos al prototipo del psicópata. Una persona en apariencia confiable y casi perfecta, pero con gran falta de empatía. Al igual que poseedora de una gran capacidad intelectual y dominadora de la escena, sin sentir remordimientos por sus actos.
    Mientras que, si nos ponemos en la piel de los investigadores, y teniendo en cuenta que se habla de crímenes de hace casi 30 años, con los medios de la época podemos hablar de la constancia y esfuerzo que pusieron sobre la mesa para resolver los casos que tenían. En esta historia descubrimos que ya empiezan a aplicar ciertas pruebas técnicas comunes en la actualidad. Igual que conocemos los inicios de la UCO (Unidad Central Operativa de la Guardia Civil).
    Pasamos a confirmar cómo ha cambiado la Sociedad desde finales del siglo XX hasta la actualidad con respecto a las agresiones y a los agresores sexuales. En estos años ha virado el pensamiento y la creencia de la que la víctima es la culpable a hacer pagar al criminal por sus actos.
    Por último, se ve que los jueces han dejado de colaborar estrecha y activamente con los investigadores a mantenerse en un alejado segundo plano.
    La obra es bastante interesante y me ha valido por conocer un caso importante de la crónica policial de España. Con una narración que incluye gran cantidad de términos técnicos, pero a su vez se hace muy sencillo de entender el relato. Por todo es muy recomendable su lectura para pasar un buen rato y no dejar caer en el olvido ciertos temas.